Debido a que la colocación de la propaganda electoral en la Ciudad de México está fuera de control, el coordinador de la Alianza Verde en el Congreso de la Ciudad de México, diputado Javier Ramos Franco, busca que la propaganda electoral se ubique, instale y retire en los mismos términos que toda la publicidad exterior de la capital del país para evitar la saturación y la contaminación que ocurre cada 3 años por la contienda electoral.

Durante la sesión virtual del congreso, el diputado local Ramos Franco explicó que al reformar el Código electoral y la Ley de publicidad exterior se logrará que las calles no se llenen de anuncios y carteles inútiles en sus postes de luz, de telefonía, de semáforos, de señalamientos viales, en sus puentes, en sus plazas y en sus parques.

"Con esta medida, el Partido o candidato que quiera publicitarse, deberá utilizar los medios que están diseñados para ello, como las carteleras, las vallas, los parabuses o los bajo puentes, entre otros, y pagar por ello, tal como lo hace cualquier otra persona que quiere anunciarse, claro, dejando a salvo el derecho de las personas que quieran colocar esta propaganda en sus casas, así como el uso del internet y las redes sociales", detalló el ecologista Javier Ramos.

El también vicepresidente de la Comisión de Preservación del Medio Ambiente, Cambio Climático y Protección Ecológica del Congreso capitalino, subrayó que la iniciativa de ley busca recuperar la calidad estética de los espacios urbanos, promoviendo un entorno más limpio, ordenado y armonioso, que trate de brindar paz a todas y todos los ciudadanos.

"Al evitar la presencia de propaganda política en lugares de convivencia pública, también contribuiremos a reducir el estrés, la saturación visual, facilitar la movilidad peatonal y vehicular y a mejorar la experiencia urbana de las y los habitantes de la ciudad", abundó el coordinador de la Alianza Verde en el Congreso de la Ciudad de México, el legislador Javier Ramos Franco.

"Las y los capitalinos estamos hartos de esta basura electoral que no sirve para nada más que para contaminar y afectar el entorno en el que vivimos. Estos pendones y lonas de partidos y candidatos no sirven para convencer a nadie de que voten por ellos. Si queremos mejorar el sistema político-electoral, promovamos el debate, la construcción de acuerdos y la entrega de buenos resultados de gobierno. Pero esta propaganda electorera ya no funciona ni abona en nada a construir una mejor Ciudad", finalizó Ramos Franco.